— ¿Es todo?
— Es todo.
Ella cubrió con la sábana su cuerpo desnudo, como si acabara de morder la manzana prohibida y cayera en la cuenta que el paraíso había desaparecido. Los pájaros ya no cantaban y el aire se hizo tan denso que le costaba respirar. Mientras, él se abrochaba los botones de su camisa con una increíble destreza, como si hubiera mordido ya muchas manzanas prohibidas.
— Es todo.
Ella cubrió con la sábana su cuerpo desnudo, como si acabara de morder la manzana prohibida y cayera en la cuenta que el paraíso había desaparecido. Los pájaros ya no cantaban y el aire se hizo tan denso que le costaba respirar. Mientras, él se abrochaba los botones de su camisa con una increíble destreza, como si hubiera mordido ya muchas manzanas prohibidas.
29 comentarios:
La verdad es que nunca se supo si fue una manzana. En nigún lado dice que lo fuera.Pero da igual, la sensación es la misma.
Brillante, amiga. Cada día te admiro más.
Qué decepción la de ella, al comprobar que el paraíso no existe...
Excelente microrrelato!
Un beso!
Tengo que procurar llegar antes que Rayuela. Coincido siempre con ella.
Y me ratifico en mi comentario a tu entrada enterior. Excelente, sí, delicado y duro al mismo tiempo. Ni falta ni sobra palabra alguna. Genial, querida mía.
Un beso.
Se me ha venido a la cabeza Bugs Bunny, el personaje animado más famoso de la Warner Brothers. Recuerdo que decía: ¡Eso es todo, amigos!
Capto perfectamente que tu relato, aparte de ser magnífico, no tiene ningún trasfondo de broma, no te enfades.
Yo no he leído el libro "Los hombres que no amaban a sus mujeres", pero ése de tu texto es de los que se tienen bien ganado el título.
Un beso.
Vaya..Así que era éste...es todavía más bonito de lo que me imaginaba. como bien te ha dicho Juanma no sobra ni una palabra.Un abrazo amiga del alma.
Qué duro y qué cruel pensar que "éso es todo".
Grande (por lo bueno) el relato!
Precioso relato.
Conciso, verdadero.
Pobre Eva, todas creemos que nuestro Adán es el primero en amarnos.
Un besazo.
Qué lindo y triste.Qué redondo este micro.
El tendría que haberle contestado: "es todo por ahora, lo demás tienes que construirlo tú cuando yo me vaya, ¿no te lo había dicho?"
¡Ay!
Estupendo relato. Me viene a la cabeza el título de aquella novela de Osvaldo Soriano: "Triste, solitario y final".
Flaca: Pues seguro que tienes razón sobre que el fruto prohibido pudiera muy bien ser otro. Quizá se mezcló en mi cabeza la manzana retenida de Blancanieves y su príncipe besándola con ese otro... "fruto del pecado". Pero como bien dices, la sensación hubiera sido la misma con una uva, con una fresa o con un melocotón.
Gracias por compartir mis textos y gracias siempre por tus palabras.
Rayuela: Una decepción por otra parte tan inevitable como necesaria. Aunque quién sabe si...Tal vez haya otros paraísos por descubrir.
Gracias por tu mirada.
Juanma: Vuelves a sacarme los colores. Gracias por tus apreciaciones porque sé lo bien que tú escribes y me alegra que te guste de verdad.
Otro beso para ti bien grande.
Pepe: Lo primero gracias por esa sonrisa que me has sacado ¡Cómo enfadarse con Bugs Bunny!
Yo tampoco he leído "Los hombres que no amaban a sus mujeres", pero sin duda, ellos se lo pierden.
Un gran abrazo
Marisa: ¡Pues qué decirte! Mi memoria puede ser incluso más escueta que este micro...relato, supongo:) Me alegra que te haya gustado. Y desde luego, en todo caso, lo que faltan son muchas palabras. O no. A veces con las justas está todo dicho.
Un besazo.
Gypsi: Un placer compartir miradas. Gracias por la tuya. Espero pronto poder acercarme a tus poemas, a tus reflexiones, a tus relatos..."Acercanza" bontio nombre.
Un saludo
Mª Luisa: Puede que para Eva fuera el primero. El error no es de ella. Lo importante no es ser el primero o el último, sino saber amar, encontrar el paraíso.
Un besazo y hasta pronto.
Santiago: Supongo que hay cosas que se aprenden solas. Supongo que a veces no hay palabras más elocuentes que las que no se dicen. Fíjate que hasta pensándolo bien, sobra la pregunta y la respuesta. Los cuerpos hablan por sí mismos.
Un abrazo.
Andrea: Lo primero decirte que tengo muchas ganas de pasarme por tu casa a echarme una risas, pero no son momentos de risa para mi. Los jardines blanco se tiñen de negro por minutos.
Me alegra que te haya gustado mi microrrelato.Osvaldo Soriano. Me lo anoto. Contigo siempre aprendiendo. Gracias y un beso.
Que desilución, ella que se habia creido que habia magia, se dio cuenta de que no habia nada, todo era frio y solo había un poco de sexo. Un besito
ahahah, eso momento q el abrocha su camisa con increìble destreza... es tan REAL
El paraíso es como la felicidad, de fabricación casera.
Fuera decepciones.
Un beso
Cruel sensación...pero sigo pensando que la historia nunca se refirió a eso.
Y el paraíso, sí existe...en momentos...eternos en su brevedad.
La novela de Soriano trata de algo totalmente diferente, pero tu cuento me sonó como su título... Me dejó una sensación de tristeza y soledad... casi de desolación.
El problema, precisamente: las espectativas de cualquiera frente a las posibilidades.
Nunci: Es que la magia es una cosa muy seria. No basta con decir "Abracadabra".
Otro besito para ti. Ahora sí:)
Descarga: Me alegra verte por aquí. Creo que la respuesta está en tu blog. Me encantó.
Te leo. Un beso.
Añil: Ojalá fuera tan fáicil. Pero fácil o no, estoy contigo.
Gracias por tu visita.
Un beso.
Maga: Con tu permiso,vuelvo a reescribir mi respuesta. Quizá hayas leído la anterior, y por ello deseo puntualizar mi propio comentario. La Historia es siempre susceptible de ser interpretada. Con esta historia (microrrelato) creo que ocurre lo mismo. Son los elementos que no aparecen los que hacen que la historia sea de cada lector.
Particularmente creo como tú, que el paraíso existe en ese instante eterno...Instante por definición y eterno por poético. Pero instante al fin y al cabo.
Un abrazo y gracias siempre por tu mirada.
Andrea: Gracias. La verdad es que sí. Desolación es un buen adjetivo.
Luis Felipe: Espectativas y posibilidades. Dos buenos sustantivos para asociar antes de hacerse ilusiones.
Siempre una reflexión interesante la tuya.
Un abrazo.
Es increible la imagen que describe...Es brebe pero intenso,muy bueno.
Cada día me gusta mas y mas lo que escribes.
Besos.
José Alfonso: Todo el mundo es bienvenido a este blog y a compartir su mirada con la mía, con la de todos, respecto a los textos que escribo.
En cuanto a la información que nos dejas, ahí queda para quien le pueda interesar.
Saludos.
Arturo: Mi querido Arturo. No sabes cuánto me alegro de compartir mi blog contigo y viceversa. Gracias por tus palabras. Yo te debo muchas.
Un besazo
¿Es todo?
— Es todo.
Si eso es "todo" ese todo es nada.Si "eso" es "todo" el paraiso es una falacia.(¿No?:Me pregnto...y pregunto )
Juan José: Sin duda era una falacia. Hay personas que tienen el hábito de emplear falsedades sin calibrar los daños ajenos, pero también es cierto que existen personas que creen ver el paraíso en cuanto ven un manzano. No sé si respondo, pero es que no suelo responder a lo que escribo. Porque lo escribo pasa a ser directamente del que lo lee.
Un saludo y gracias por tu tiempo.
Excelente, me ha encantado. Cuentas la historia genialmente bien.
Sosegado: Bienvenido a este rincón del mundo. Tengo por costumbre responder a todos los que dejan su mirada plasmada aquí. Lo que no esperaba es que alguien se tomara la molestia de ir hacia atrás. Porque la última entrada no puede sino dar una ligera idea de cómo es la creación del poeta que sea. Gracias por leer esta manzana con tus propios ojos.
Un abrazo.
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