Gracias a todos por vuestra mirada.

jueves, 4 de febrero de 2010

Dos más uno

Para Lucas, la suma de dos más uno.

Con todo mi amor….


Dos más uno



Llegaste para completar mi felicidad

sin que yo supiera que estaba incompleta.

Sin saber que tres es el número perfecto

quién sabe, si porque siempre fui la tercera.



Cuando eran uno y dos, sentí que el mundo

era perfectamente redondo

que nada sobraba ni faltaba

que ya nadie cabía entre nosotros.



Pero llegaste tú, justo a tiempo.

Justo cuando sonó la campana.

Llegaste con tus ojos de niño

y tu sonrisa temprana.



Entonces supe, que tres era el número.

El número que faltaba

para completar el círculo.



Porque tres, siempre será

la suma de dos más uno.


Epílogo.


Y yo no sabía que la suma no cuadraba. Que dos son mucho más que dos y que tres es mucho más que dos más uno. Yo lo que no sabía es que te querría como el primer día. Porque ya entonces sentí que mi vida era tuya y hoy sigo sintiendo lo mismo. Porque eres tan único como ellos, tan tuyo, tan fuera de mi y tan dentro…Eres la clave de mi vida. La que nos encaja a todos, la que deja un rastro por donde pasa y saluda a la gente desconocida. Eres el que se enfada y patalea y el que corre a dar un beso dejando el juego a medias. Eres la unión perfecta.

28 comentarios:

Azpeitia poeta y escritor dijo...

Que bello recorrido por tus sentimientos, materializados en los simbolos de la complementariedad de los números y de esos huecos que nunca acaban de llenarse...mi felicitación por tu página y tu poesía...un abrazo de azpeitia

© José A. Socorro-Noray dijo...

Este poema es pura y simplemente una preciosidad.


Es un placer leerte.


Un abrazo

Fernando dijo...

del amor de una madre no caben más que hermosass palabras...besos.

Bea dijo...

Si todas las Madres fueran y sintieran como tu, el mundo sería muy otro.
Fue hermoso, reconfortante, emcionante...leerte.
Besos a una Sra. que es una gran MADRE.

Susana Peiró dijo...

Ah ese mágico 3...Veo que también tiene enorme significado para Vos!

Bellísimo trabajo Poetisa, Muchísimas Gracias por compartirlo con nosotros!

Y por supuesto te dejo mi Beso y Abrazo con todo cariño!

Maria Luisa dijo...

media luna-

Precioso poema de amor.
De amor desinteresado, sin condiciones, solo dar.
Ese es el amor de madre.

¡ Que suerte tienes Lucas !
¡ FELICIDADES !

Te quiero.

andal13 dijo...

Una belleza.
Qué hermoso es amar así.
Y qué hermoso es que nos amen de esa manera.

Y quién dijo que la aritmética no tiene su encanto.

Jorge Torres Daudet dijo...

La aritmética del amor; dos más uno
mucho más amor.
El poema es precioso; que siga creciendo ese amor.
Besos

carmen jiménez dijo...

Azpeitia: Un gusto verte por aquí. Espero verte también en Zaragoza.
Saludos.

Noray: Así es el amor más grande. Puro y simple amor.
Gracias por tus palabras.
Un abrazo.

Fernando: Sin duda, eso lo sabemos bien todos los hijos. Lo grandioso es cuando lo sabes desde el otro lado.
Gracias por tus hermosas palabras.
Un abrazo grandote.

carmen jiménez dijo...

Bea: ¡Cuánto me alegra tu visita! Gracias por dedicarme tan bellas palabras. La verdad es que a una le cuesta entender que puedan haber distintas clases de madres. Pero desgraciadamente las hay, y no hay nada más triste que un niño sin una mamá que le ame.
Un besazo.

Susana: Pues sí. Ya ves, yo creí que en mi vida no podría repetirse más veces el número mágico, y Lucas vino a confirmarme que no hay nada imposible.
Mi cariño para ti también.

María Luisa: Tú lo has dicho. Creo que los hijos nos descubren nuestra capacidad de amar más allá de todo pronóstico. Nos sacude, nos despierta, nos cautiva, nos atrapa. Para siempre y un día más.
Un beso de madre a madre.

Andrea: La verdad es que sí. Cuántas veces se echa de menos el amor de una madre! Cuántas veces añoramos sus mimos y sus caricias. Ese regazo al que volver cada día del cole y contar lo malos que han sido las otras niñas con nosotras, y ellas, sólo ellas, son capaces con un beso de quitarnos todas las penas.
Yo no puedo parar de besarles.
Un beso para ti también Andrea, que los besos, son casi todos buenos, o así deberían serlo.

Jorge: Un gusto volver a tenerte por aquí. La aritmética no siempre compite con las letras. A veces las complementa. Sí señor.
Gracias por tus palabras.

MarianGardi dijo...

Que hermosura de letras sentidas con el corazón de mama.
Felicidades.
Que disfrutes en tu segundo encuentro de poesía, yo no puedo ir!!
Besos

Elena dijo...

El sentimiento de ser madre, es algo especial, saber contarlo también. El amor de una madre es lo más puro y limpio que existe, es el único donde no median los intereses. no se da nada a cambio de nada, se da por que ES...
Bello tu poema.
Besitos.
Nos vemos en Zaragoza.

Bea dijo...

Como siempre dije: lo mío no es escribir. Por tanto no sé poner sobre papel mis sentimientos.
Ser Madre es algo tan maravilloso que no sabría explicarlo nunca, y menos en forma de poema.
Pero cuando llegas a ser Abuela...
todos esos sentimientos se multiplican por "3".
Espero y deseo que algún día puedas escribir un poema (como tu sólo sabes hacerlo), dedicado a un@ niet@.
Te aseguro que es algo indescriptible lo que se siente por esos retoños que nos da la vida.
Ojalá pueda, algún día leerte en ese rol.
Besos mil

carmen jiménez dijo...

Marian: Gracias por tus letras. Siento que no puedas ir, pero seguiré leyendo tu blog igualmente.
Un abrazo.

Elena: Realmente es un sentimiento que sólo se descubre cuando eres madre. Es algo que verdaderamente engrandece el corazón.
Será un gusto poder encontrarnos de nuevo. Nos vemos.
Un besito.

carmen jiménez dijo...

Querida Bea: Para no ser lo tuyo escribir, consigues siempre llegarme directa al corazón. Ciertamente no soy abuela todavía, aunque es algo que no quisiera perderme. He visto como mi padre a revivido con Lucas, y como mi madre sigue manteniendo ese amor inconmesurable para seguir cuidando de su último nieto como si fuera el primero.
Tal vez deba dedicar un poema a todos esos abuelos amorosos que vuelcan su corazón en ellos como lo hicieron con sus hijos.
No me cabe duda de lo mucho que tú y Santiago disfrutáis y hacéis disfrutar a vuestros niet@s.
Ojalá algun día no muy lejano pueda yo disfrutar como tú, y ser una abuela feliz.
Un beso muy grande para ti y todos los tuyos.

tomitú dijo...

Qué lindo Carmen...tu poema es un dardito directo al corazón de las madres enamoradas de sus hijos (que deben de ser todas). Tan lindo como ese Luquitas bello que tienes. Que tenéis los cuatro.
Beso grande amiga.

Conchi dijo...

Me acerco a tu blog,creo que por primera vez, nos conocimos en madrid y espero volver a verte en Zaragoza.
Entro de puntilas en tu poema, por si acaso el numero tres está dormido, sabes, el amor de madre es tan inmenso que no importa el número de hijos, siempre hay suficiente para todos.

Jesús Arroyo dijo...

¡Madraza!
No pienso decirte nada más. (en esta entrada, claro)

Galeón dijo...

Había pensado no decirte nada, no caer en el tedio, no acostumbrarte ni acostumbrarme a tanto y a tan poco, no sé porqué pero así era.

Pero seguramente este poema y estas palabras son las menos apropiadas para dejar de felicitarte, para mandaros un beso a ambos, para darte la enhorabuena por esa ramita que da verdor al árbol y poco a poco se va haciendo frondosa,aunque para tí es ya tan gruesa que nada la puede quebrar en lo humano, aún cuando se conforme con la fuerza de los elementos y se retuerza, gire, cicatrice y vibre de forma independiente al tronco del que surgió y al que indefectiblemente, más recta o más torcida, permanecerá unida.

No pierdas nunca la capacidad de sorprenderte, sé bienvenida al Club de los Imperfectos.

Lucas vive como nosotros: aprendiendo.

carmen jiménez dijo...

Tomitú: Gracias por tu mirada, por acercarte por aquí y compartir a mi Luquitas un poco más.
Sin duda, tiene la suerte de contar casi con tres papás. Pero sólo una mamá, jeje. Es que algunas valemos por tres.
Beso grande.

Conchi: Bienvenida a este rincón. Entra siempre que lo desees. No necesitas llamar a la puerta. Siempre está abierta. Puede que sea la primera vez que me lees, pero yo todavía recuerdo tus bellos poemas del Gijón, y además tengo la suerte de haber leído tu libro "Meridiano 50". Desde aquí lo recomiendo. Será un placer volver a verte en Zaragoza.
Un beso grande.

Jesús: GRACIAS. Podría decirte también muchas más cosas, y te las diré. Tendremos tiempo en nuestro viaje a Zaragoza.
Un abrazo padrazo.

Galeón Galeón: Siempre nos supo a poco todo. El tiempo nunca era suficiente. Gracias por no pasar por alto esta entrada dedicada a mi Luquitas, a lo mejor que la vida nos ofrece. Gracias por todas las veces que me has acompañado y espero sigas acompañándome con ese sabor agridulce que nos ha acompañado siempre en nuestros días de veranos inacabados...GRACIAS una vez más.
Si algo no he perdido es mi capacidad de sorpresa, de asombro. Tal vez soy de las que nunca se termina de aprender bien la lección. Siempre encuentro algo que se me pasó por alto. Ya sabes, de las que estudia y estudia para llegar al diez, pero el nueve me recuerda que siempre queda algo más por aprender. No temas, a veces me siento como Lucas.
Quiero mi carnet del Club.
¿Te acuerdas?
Un beso, dos, tres, cuatro.

FLACA dijo...

Es tan lindo lo que escribiste que cualquier palabra que pretenda hacer un comentario de ese sentimiento expresado a Lucas sería insuficiente.
Dichosos los niños bien amados y dichosos los padres por ese regalo que nos da la vida.

Marisa Peña dijo...

Ay...qué bonitooo.Si es que nuestros retoños nos llenan de alegrías ( y de temores, angustias, meteduras de pata...;)) Pero son lo mejor y lo más grande que hemos hecho,¿verdad? Va por ellos...Mil besos guapa

Miguel Ángel Yusta. dijo...

¡Es tan hermoso!
Simplemente....un beso.

Anónimo dijo...

En las casas donde hay una criatura se comprende perfectamente lo que significa aquello del "pan bajo el brazo"; que no es nada de dinero, ni algo similar.

Sino de luz.

Besos, amiga.

Anónimo dijo...
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Marina Filgueira dijo...

Precioso: felicedades por tanta felicidad. Besos Ser felices siempre.

Anónimo dijo...

Lucas, Lucas, ¡que suerte tienes!

Cuando seas mayor comprenderás que tienes una madre genial, tan bondadosa y amorosa como las alas de una mariposa, siempre presente y atenta a tu llamada incierta.

Mi querida Mari Carmen, es precioso y tu dos mas uno también lo comparto.

Un besito y espero vernos pronto

tomitú dijo...

Me gustan mucho estas palabras puestas en versos y con ese juego matemático.