Gracias a todos por vuestra mirada.

viernes, 10 de enero de 2020

Ya es oficial la tristeza

Queda prohibido hablar de amor
en mi presencia,
prohibida toda confianza
más allá de unos labios
que engañen al beso
en esas noches tontas
que te da por extrañar.
Prohibidas las promesas
hechas de lino,
y los abrazos que te roban
el corazón y la sonrisa
a cambio de una medalla de oro
al mérito de la estupidez.
Ya es oficial la tristeza,
la esperanza es opcional
para aquellos que todavía creen
que pueden cumplir un sueño
o que el sueño les puede alcanzar.
Yo hace tiempo que camino
sin el peso de la fe sobre mis hombros
para hacer posible lo imposible
antes de que la muerte
pronuncie mi nombre en alto.

6 comentarios:

Francisco Espada dijo...

Me entristece esta mirada íntima, este dardo que tan acertadamente ha dado en mi alma. Recuerda que sin esperanza ya hemos tirado la toalla. No te desalientes, cree en ti, en el poder de la voluntad que todo lo puede y no pesa nada.
Un fuerte abrazo.

carmen jiménez dijo...

Gracias siempre por tus palabras de aliento Paco. Ciertamente la voluntad es más poderosa que la esperanza. A ratos paso de una a otra, como el malabarista pasa sus pelotas de mano a mano intentando que no se caiga ninguna.
Otro abrazo para ti y feliz año recién estrenado.

Jorge Torres Daudet dijo...

prohibidas las promesas
hechas de lino
dificil de cumplir. lo vrrdaderamente prohibido es hablar de desesperanza y, mas, muerte.
Anda, cambia de chip que, además, han ganado los tuyos.
Besos sin cuento.

Laura Caro Pardo dijo...


Ánimo, preciosa.

Todo pasa, Carmen, aunque a veces los períodos oscuros a veces se nos hagan larguísimos e insoportables.

Un abrazo muy largo ( y un café, cuando quieras).

carmen jiménez dijo...

Mi querido Jorge, los míos no existen, son pura utopía. Lo mío es remangarme hasta los codos y seguir buscando la utopía de encontrar un trabajo pasados los cincuenta. En ello estoy hasta que la muerte pronuncie mi nombre en alto daré batalla.

carmen jiménez dijo...

Laura querida, no es que se hagan largos, es que lo son.