Gracias a todos por vuestra mirada.

viernes, 29 de octubre de 2010

Las golondrinas.


¿Qué se puede decir cuando todo está dicho? ¿Para qué redundar en las mismas palabras? ¿Acaso cambiando la activa por la pasiva no da como resultado el mismo resultado? ¿Acaso el sujeto no es más que la comprobación del objeto directo? ¿Acaso cambiar los factores en una multiplicación no da como resultado el mismo producto? ¿A qué cambiar de orden las palabras sino para marearlas y terminar mareada con ellas ya sin sentido, ya sin concierto, ya gastadas de tanto nombrarlas, de tanto escribirlas como si fueran un castigo? ¿Para qué buscar otras nuevas con las que enunciar una y otra vez la misma finalidad para la que fueron creadas? ¿Para qué transformarlas en verso cuando la prosa terminó por comerse todas las primaveras y todos los otoños y todos los brotes verdes y todos los amaneceres que no amanecerán nunca, y todos los atardeceres de esperanzas siempre retrasadas un paso, y otro más y otro hasta llegar al principio y no poder volver a empezar? ¿A qué quejarse de la prosa que es la vida si ella es lo más grande que tenemos? ¿A qué llorar las lunas y todo cuanto bajo su luz ocurrió? ¿A qué malgastar saliva o la punta de los dedos en escribir a lo que se fue, si hace siglos que el propio Bécquer escribió sobre las golondrinas que no han de volver? ¿Quién mejor que él para hacer de la poesía la propia vida? Quién mejor que yo para saber que el infierno existe como existe el cielo. Quién mejor que cada cuál para saber dónde está y qué palabras quiere emplear para devolver la dignidad al sujeto y dejar que los predicados se escriban hasta agotar todas las posibilidades que la gramática permita, o que permita el conocimiento de nuevas palabras, para intentar que las golondrinas vuelvan a su nido o aniden al menos en algún balcón lo más cerca posible del cielo.

Image: 'Ubaldo Bordanova. Golondrinas'

http://www.flickr.com/photos/52537477@N00/4398993687

26 comentarios:

Jose Zúñiga dijo...

Ya te digo, Carmen, a veces me pregunto para qué escribir si ya todo está escrito. Pero siempre me respondo: no es cierto.

carmen jiménez dijo...

Jose, o Zuñi, nos hemos cruzado. Debe ser cierto que no todo está dicho o al menos no todo está escrito, o al menos, no todo de la misma manera.
Besos poeta.

Unknown dijo...

Tienen razón.
Todo está ya escrito.
Pero también está escrito el camino que cada año escriben nuevas golondrinas al irse y al llegar. Y no parece importarles repetirse.

Ricardo Miñana dijo...

Yo pienso que en la vida no todoesta dicho, nunca dejamos de aprender
un placer pasar a leerte.
que tengas un feliz fin de semana.
un abrazo

Lembranza dijo...

Tienes razón Carmen, todo esta escrito, hablamos y hablamos, intentando convencer a alguien que ya esta convencido, que parece que tus palabras le llegan pero te das cuenta que es solo momentáneo, que mañana es lo mismo de los mismo. Quizá hay que llegar hasta el infierno para poder elevar el vuelo con mas confianza en que vas a llegar. Un abrazo

Laura Caro Pardo dijo...

Todo lo dicho y todo lo escrito adquiere una nueva dimensión con nuevos protagonistas y se vuelve distinto y único.
Un abrazo, Carmen.
Y gracias por tu visita.

Susana Peiró dijo...

¿Todo está dicho? A veces pareciera que sí. Incluso hay quien asegura que se abusó tanto del Verbo y se le asignó tantos significados a la Rosa, que ambos se suicidaron, desnudos e impersonales. Y el Sujeto terminó ahorcado por el Predicado.
Pero creo que los rumores son falsos. El Sujeto ha sido visto por ahí, buscando su dignidad, como siempre. Es su destino.

Y las golondrinas, vuelven cada vez, como si fuera su primera vez. Se desentienden del pasado y de las otras, antes que ella. Como las palabras, no reniegan de su estirpe. Pero saben que ningún cielo es igual a otro, saben que todo comienza de nuevo y la vida finalmente es volver a empezar.

Besos Querida Carmen.

Luis dijo...

Coincido plenamente con el comentario de José Zuñiga, es dificil ser el primero en hacer algo o que se algo sea completamente original, pero ello no es razón para no hacerlo.
Un abrazo.

Anónimo dijo...

Carmen, amiga.

Es posible que sea cierto lo que dices; pero también lo contrario.

Yo a veces me pregunto si no es la mirada coyuntural de la persona la que determina ese doble enfoque acerca de las cosas: en este caso, sobre lo escrito y la escritura.

Es como ver los días y sentirlos cómo se repiten... una semana y un mes y... Pero, por otro lado, sentir también que cada uno es distinto, creado, nuevo...

Un beso, Carmen.
Pepe.

Juanjo Almeda dijo...

Es cierto que todo o casi todo está escrito, al igual que el poeta o el escritor nunca muere, van renaciendo palabras que usamos una y más veces, para seguir diciendo cosas que ya se habían dicho. Somos drogadictos del verso y la prosa, somos drogadictos de su forma, somos adictos. Besos.

carmen jiménez dijo...

Santi: No sé si serán las mismas golondrinas las que repiten el vuelo, o les ocurrirá como a los humanos que por mucho que transitemos una y otra vez el mismo camino, los que nos siguen vuelven cada año a recorrerlo centímetro a centímetro sin escuchar los consejos. Y es que uno, está claro que tiene que andar el camino para conocerlo. Pero bueno...Aquí lo dejo.
Un abrazote.

Ricardo: Un placer encontrar gente nueva. Supongo que sea como sea, la última palabra no está dicha hasta que te mueres.
Un saludo.

Mi querida Nunci: La verdad es que tan importante es el que habla como el que escucha. Tú eres la muestra de ello. No sé, no sé si el vuelo puede remontarse desde tan abajo, pero el cielo existe, eso seguro.
Un beso gallego.

Laura: Una mirada la tuya realmente fresca, de frescura de esas de manantial. Gracias por tu aportación. ¿Será que lo mismo suena diferente en otras bocas, en otros oídos?
Un beso.

Susana querida: Me encantó eso del Verbo y la Rosa suicidándose y ese sujeto ahorcado por el predicado. Y no es que me guste la muerte precisamente, pero éstas me hicieron sonreír.
Respecto a la segunda reflexión creo que coincide plenamente con la del maestro Santi. Lástima no ser golondrina de verdad con alas para volar.
Un beso.

Luis: Supongo que para cada uno, su primera vez, es la primera. Eso es lo que importa.
Un abrazo.

Pepe: Dos reflexiones tuyas, y las dos parecen ciertas.
Otro beso grande para ti.

Juanjo: Supongo que los amantes de la palabra, de las palabras, nunca podremos prescindir de ellas por más que se escriban una y otra vez.
Un gusto verte por aquí.
Un beso.

Jesús Arroyo dijo...

Querida Carmen:
¡Cierto! todo está escrito, pero no todo lo escrito tiene sentido ni todo el sentido podrá estar en un escrito. Por eso seguimos escribiendo, para encontrar, para dejar, para buscar, para gozar. Por eso, creo, sigues escribiendo. Por eso me gusta que tu sentido quede escrito.
Besitos, guapi.

Andrea dijo...

Nos mareamos con palabras, vamos y venimos por la vida junto a ellas, viviendo mil historias, llenando nuestra hucha de conocimientos. No sé si todo está escrito, lo único que sé es que cada uno lo cuenta su manera. Bonita imagen la de las golondrinas anidando cerca del cielo. Un gran abrazo Carmen.

Enrique Sabaté dijo...

Todo está dicho y todo inventado? Seguro que no. Pero si lo está, el entretenimiento es mezclar las palabras. Si todo está dicho, habrá que inventarse un lenguaje nuevo.

Jorge Torres Daudet dijo...

Pocas palabras nuevas, pocas se inventan; pero con las mismas palabras se dicen muchas cosas, de tan distintas maneras!
Un besazo guapetona.

silvia zappia dijo...

escribir para no quedarse en voz pasiva,para reformular el vuelo.

besos*

Galeón dijo...

Siempre pensé que lo que está bien dicho, no importa que se repita una y mil veces, al fin y al cabo es lo que nos lleva a aprender, aunque para recordarlo tengamos que tropezar en la misma piedra, algunos muchas muchas veces, lo que también nos lleva a aprender, y finalmente a razonar en lugar de envestir.

Porqué seguimos buscándote para leerte, porqué seguimos componiendo para otros (“José Luis e Isabel”), porque no todo está dicho, aunque es cierto que si tuviésemos un buscador que albergara apenas unos decenios de miles de años de esta humanidad (tan deshumanizada), alguien seguramente lo dijo en algún momento, pero “ce la vie, l'histoire se répète” (ya sabes que ya soy de otra época). Cuántas veces pienso que el romano que estaba de guardia en “el casón”, en la época de Claudio Tiberio Druso Nerón Germánico, cerca de casa, tenía seguramente la misma cara de tonto que yo.

De todas formas siempre hay algo que nos distingue, que nos hace diferentes, genéticamente sabes que avanzamos muy despacio, nos superan los inventos, pero los males del hombre siguen siendo los mismos, la envidia, la codicia, etc., etc., el “ansia” que diría José Mota, por ponerle una nota de humor.

No quiero alargarme más, pero Tú como Mujer eres diferente a todas: todas son como tú, pero no te pareces a ninguna.

Sigue dejándonos tu esencia y volveremos al alero de tu tejano para colgar nuestros nidos.

carmen jiménez dijo...

Jesús: En realidad por eso seguimos viviendo para buscar, para encontrar, para gozar, y para dejar la mejor huella posible.
Un abrazo compi.

Andrea: Quizá lo mejor de escribir sea precisamente descubrir otras letras. A veces parecidas, otras completamente distintas que nos enseñan y nos muestran caminos diferentes. Sea como sea, como bien dices, cada uno cuenta a su manera lo que a su manera vive, lo que a su manera siente.
Un beso

Enrique: Mis profesores de relato siempre decían que uno tiene que inventarse la mirada. De ahí siempre nace un lenguaje nuevo.
Un besazo.

Jorge: La verdad es que tienes razón. Hay maestros de la palabra que hacen con ella verdaderas maravillas. Con ellas inventan otros mundos, incluso inventan éste y lo convierten en poesía.
Un beso poeta.

Rayuela: Lo cierto es que la voz pasiva nunca me convención del todo. Reformulemos...
Mil besos*

carmen jiménez dijo...

Galeón: Primero de todo, quiero darte las gracias por seguir anidando en estas tejas. No sé yo si son muy seguras. Se tambalean a veces como si todo el tejado fuera a hundirse, pero el caso es que resisten a las tormentas (con alguna que otra gotera), resisten al calor de verano, a los vientos...Van resistiendo gracias precisamente a todas esas letras que se entrecruzan y muestran universos enteros creados por ellas. Tú sabes que en el fondo tengo fe en todas y cada una de las palabras que se dicen o se escriben.
Los males del hombre pueden que sigan siendo los mismos, pero también su bondad...
Seguro que ese romano sabía mucho de eso.
Un beso grande grande.

Marisa Peña dijo...

Ay carmen...yo a veces pienso que no tengo nada que decir, que todo está dicho, escrito. Que cada vez debo aburrir más y a más gente. Que ya lo he dicho todo, que se ha gastado el manantial de mis palabras. Pero me repito, hasta la saciedad, hasta el hartazgo, porque, como muy bien dice santi, siempre volvemos, es ley de vida. Y los que estén cansados, no volverán...
Ten por seguro que los que te queremos siempre volvemos.

Mónica López Bordón dijo...

Querida Carmen:

¡Quedan muchas cosas por escribir! siempre se puede seguir aprendiendo. Bécquer fue uno de los poetas predilectos de Vicente Aleixandre y mira todo lo que escribieron ambos. Hay camino para todos, como el vuelo de las golondrinas.
Para el poeta siempre, el siguiente paso es escribir el próximo poema. Un mundo posible para todo aquel que lo desee.
Un fuerte abrazo y muchos besos
Mónica

campesina dijo...

Quizás esté todo dicho y todo por decir. Quizás no sea lo escrito y sea vana la esperanza de un nuevo texto (porque hoy parece imposible ser original). Es lo leído de infinitas maneras lo que cambia, lo que sorprende y maravilla. Hiciste que volvieran otra vez las golondrinas, otras, las mismas, y has sido tan original. Besos.

Elvira Daudet dijo...

Querida mía:

Te voy a responder con una anecdota que ya conté en un libro.
Dicen que Corregio, amilagrado por la belleza de la santa Catalina de Rafael, exclamó:"anch'io so pittore". El desafío de la obra maestra y el orgullo de pertenecer a la misma casta de los geniales.
Niña, te quiero. Elvira

carmen jiménez dijo...

Marisa: Si mis palabras fueran tan dulces como tus versos, creo que no me cansaría nunca de escribirlas. En realidad, he de desvelarte que tras mis palabras se encierra ese dolor que surge cuando llueve sobre mojado.
Gracias por estar, por volver, siempre.
Un beso amiga mía.

Monica: Es un placer tenerte por aquí. Ciertamente las palabras crean mundos, y he de decir que los tuyos son una delicia visitar. Cierto es también que el poeta nace para escribir poesía, y luego otra, y luego otra más. Y si no, como bien dices, ahí están los maestros para recordárnoslo.
Un beso

Campesina:Me quedo con esa posibilidad de decir las cosas de mil maneras diferentes. Quizá una de ellas sea la que sirva para transmitir la palabra más allá de la palabra.
Y Gracias amiga.

carmen jiménez dijo...

Elvira querida: Los desafíos nos engrandecen sin duda. Siempre es alentador tener delante un Rafael al que admirar.
Gracias por tus palabras.
Un beso y espero verte muy pronto.

FLACA dijo...

Siempre queda algo por decir, estoy segura de eso. Y siempre habrá una forma diferente aunque los temas y las palabras sean las mismas. Y a las pruebas de tus maravillosos escritos me remito. Besos,Carmen.